Los médicos del Reino Unido que trabajan en urgencias y en atención primaria tienen riesgo de agotamiento, estrés y fatiga según un estudio publicado en la revista BMJ Open.
Según este estudio realizado mediante una encuesta a 1651 médicos casi uno de cada tres médicos (31,5%) tenía altos niveles de agotamiento, mientras que uno de cada cuatro (26%) tenía altos niveles de estrés.
Los médicos de estas especialidades se hallaban más agotados que las de las demás. Incluso tenían el nivel más bajo de satisfacción por poder ayudar a los demás y hacer bien su trabajo, propio de profesiones como la medicina.
Para evitar el estrés los médicos afirmaban que intentaban distraerse de los problemas como forma de afrontar el estrés. Los médicos hombres, que eran minoría, eran significativamente más propensos a utilizar la negación y el humor para hacer frente a la situación, mientras que las mujeres utilizaban más otros tipos de estrategias como el reenfoque positivo.
¿Qué pasaría en España si se hiciera un estudio similar?
Probablemente, y por desgracia, el resultado sería similar o peor. La situación de la atención primaria, considerada la puerta de entrada al sistema sanitario, pero también uno de sus pilares fundamentales no está bien reconocido en ningún sentido tampoco en nuestro país y su deterioro pondrá sin duda en el futuro la sostenibilidad de todo el sistema sanitario tan bueno que tenemos.