¿Qué quiere decir deprescribir? Sencillamente, retirar medicamentos crónicos a los pacientes.
Los médicos estamos acostumbrados a acabar nuestras consultas con una receta. Los pacientes, por otro lado, también esperan un remedio para su salud que vaya escrito en una receta y que sea tan sencillo como tomar un fármaco y solucionar la sintomatología.
Sin embargo, la realidad es que en demasiadas ocasiones la solución a los problemas de salud no es un medicamento. La presión de la industria farmacéutica, la presión asistencial de sistemas sanitarios, cada vez más colapsados, y la demanda de la sociedad de soluciones rápidas y fáciles de implementar, han favorecido el auge de la medicación para arreglarnos la vida. La pastilla para dormir, la del colesterol, la del azúcar, la de la tensión y … todo solucionado.
Lamentablemente, las cosas no funcionan así. Muchas veces si fuéramos capaces de cambiar nuestro estilo de vida y hacer más deporte, perder el peso excesivo, y comer y beber más saludable, o eliminar otros tóxicos como el tabaco de nuestras vidas podríamos eliminar también las pastillas de la tensión, del azúcar y del colesterol y, tal vez, incluso las de dormir.
¿Pero no es más fácil tomar una pastilla y vivir feliz? Un paciente decía hace poco, “prefiero tomar pastillas y poder comer de todo y así disfrutar de la vida”. Realmente es para planteárselo. Sin embargo, las pastillas acaban teniendo efectos adversos, interacciones y contraindicaciones. A veces acabamos tomando un medicamento para paliar los efectos adversos de otro en una cascada un tanto infernal.
Todo ello es especialmente cierto en personas mayores. Las pastillas del colesterol pueden dar problemas musculares, sobre todo más allá de los 75 años, las del azúcar, hipoglucemias (bajadas de azúcar) y otros problemas, las de la tensión pueden dar tos, hinchazón de las piernas, dolor de cabeza y hasta bajadas de tensión que pueden dar lugar a caídas y lesiones. Las de dormir pueden producir adicción, caídas, efectos paradójicos etc.
Muchas veces no las podemos evitar, pero otras el posible beneficio no supera los riesgos. Aquí es donde nace la deprescripción. Los médicos de familia revisan las largas listas de medicamentos crónicos de sus pacientes y les proponen dejar algunos de aquellos en los que el balance riesgo-beneficio sea más dudoso.
Se acaba de publicar un estudio en la revista British Journal of Clinical Pharmacology que es una actualización de un metaanálisis. Un metaanálisis es un análisis de una suma de estudios científicos que abordan una determinada cuestión. Por lo tanto, es el sumun de la evidencia científica. En este caso se analizan 259 y concluyen que la deprescripción no sólo mejora la vida de la gente, sino que en pacientes de 65 a 79 años disminuye la mortalidad.
¡En resumen, si su médico le propones abandonar una medicación, hágale caso!!
QUEK, Hui Wen, et al. The effect of deprescribing interventions on mortality and health outcomes in older people: An updated systematic review and meta‐analysis. British Journal of Clinical Pharmacology, 2024.
«Autor: Dr. José Luís Ballvé.»
— Médico de familia